2006 - 2011

viernes, 30 de noviembre de 2007

Un poco CRAZY

A veces papá y yo pensamos que estás un poco chapita.... Por supuesto que tenés a quien salir (y no lo digo por papá).
La última es: yo te tengo que dar de comer, pero cuando se trata de tomar no me dejás y querés que te dé papá. Papá te tiene que bañar, pero cuando te quiere sacar, no querés saber nada y querés que vaya yo. Cuando caminamos querés que te lleve siempre yo a upa, pero de repente te agarra el pire y empezás "noo, papaaa" y le tirás los brazos a él.
El yougur quizás te lo puedo dar yo, así como el melón. Pero si es banana o manzana, papá. La leche yo.
No estarás un poco loca??
Igual te amamos.

martes, 27 de noviembre de 2007

El más importante: Gollum

Gollum.... cómo lo querés a Gollum. Antes de que nazcas todo el mundo se preguntaba qué íbamos a hacer con él. Tenían miedo que te hiciera algo. Pero desde el día que entraste a casa por primera vez, jamás atinó ni a levantarte una uña!! Y eso que lo volvés loco. Lo agarrás, lo pellizcás, le metés los dedos en las orejas, le gritás que NO todo el tiempo, lo sacás de todas las cajas en donde se mete... pero él aún así te cuida todo el tiempo. Ronronea sin parar cuando llegás del jardín, no se mete en tu cuna, no te molesta cuando dormís, y juega con vos cada vez que le tirás la pelota o la ratita. Con todo lo que le hacés, a mí, a estas alturas, ya me hubiera comido viva!!!

La madrina y cía.


Como sos mitad de la cole, mitad católica, decidimos no bautizarte. Pero igual no quisimos que te quedes sin madrina. En realidad, no vamos a mentir, ella se autoproclamó madrina y no me pude negar. Al principio no te quiso... bah, eso fue cuando estabas en la panza. Cuando le dije "voy a tener una nena" casi se muere. Ella quería el varón.... pero igual cuando te conoció te tomó cariño, y ahora podemos decir que te adora. Digamos que Lu es una persona un poco especial con los chicos. Cero pasciencia. Pero en realidad se hace la dura.... porque después siempre quiere verte, te llena de regalos (ya no sabemos donde meter tantos chiches), te quiere dar besos, se enoja cuando te ponés arisca, y a pesar de toso siempre te invitan a la quinta para que puedas jugar!!! Además ella ya sabe que al ser madrina, si algún día a nosotros nos pasa algo, se tiene que hacer cargo!!

Luli es como tu segunda madrina, siempre dispuesta a cuidarte, te mima, te trae muchos regalos caros (así que no la pierdas!!), aunque siempre te quedan grandes!! jejjeje

Las dos te quieren mucho. Ellas nos llenaron la casa de juguetes y de ropa, y te convirtieron en una cheta de zapatillas Nike, vestido de Paula Cahen D'Anvers, ropa de Zara..... y no sé cuántas cosas más.

Por el momento, no tenés padrino.... Papá nunca quiso elegir, así que las Lu's son como si fueran madrina y padrino.

De paso te chusmeo que tu madrina, al fin se casaaaaaaaaaaaaa!!!!

La Flia Parte II

Los Silbergleit. La abuela Jusita es una santa. Te cuida todos los viernes y te llevás muy bien con ella. Cuando viene a casa te canta mucho. Vas a terminar odiando los coros o amándolos. Pero la pasan bien. Cuando vamos a la suya te juega con las piedritas y la vaca lechera, y a vos te encanta. No para de decir que sos demasiado inteligente, atenta, y sobre todo demasiado linda para ser hija nuestra.
El Abuelo Ber. No lo ves tanto como a la abuela Jusita.... pero cada vez que estás con él la pasás muy bien. Te reís de sus caras, él te revolea para todos lados, en el sillón de Perla te hace dar vueltas, y tiene la idea de llevarete a pasear en la camioneta!!! Pero por ahora no le voy a dar el gusto.... Está separado de la abuela y vive con Perla, abuela postiza (Jusita vive con José, abuelo postizo), y Morgan, su simpático perro.
Tus tíos viven en España. Gustavo te quiere mucho pero cuando te ponés pesadita (cosa que te pasa seguido) te dice: "camila, a dormir". Gus vino a verte cuando estabas en la panza, cuando naciste y siempre que viene a ver a Tomy te visita, nos lleva de paseo, y además a él le debemos la casa, el auto y muchas otras cosas más. Tomy, el hijo de Gus, se hace el que no te quiere pero te adora. Quizás está medio celoso, pero le encanta que te rías de su "cara de pitito". Gaby te vio una sola vez, o dos, así que no se conocen mucho (porque también vive en España), pero seguramente la vas a conocer y querer un montón. La abueja Jusita dice que te parecés a ella, ojalá, porque es la más linda de la familia. Tus primas Luli y Tami te vieron una sola vez. Son hermosas y yo muero de amor por ambas aunque las haya visto tan pocas veces. Ellas siempre ven tus videos y tus fotos desde España.

La flia!!!

Empecemos por la materna: tus abuelos Tutti y Jorge. De Tutti ya un poco te conté. Cuando llegás a su casa es todo amor y besos. Siempre se te tira encima y vos que sos muy arisca la sacás a los gritos. Por ser la primer nieta, te tiene pasciendia y te quiere. Cuando te dejo sola con ella se divierten mucho, te lleva a la calesita (algo que ni con los hijos hizo!!!), te peina, te juega con la muñeca diabólica Amighina, y cuando viene a casa de paso liga unos rajuñasos de Gollum (capítulo aparte, tu mejor amigo).
El abuelo te dice "Hola abu" con cara de muppet desde que tenés un día... Pobre, tiene la ilusión de que algún día se lo vas a decir.... pero falta! Algo te causa risa en él, porque siempre le sonreís, le hacés fiesta, él te saca la lengua y se la devolvés. Ya va a empezar a hinchar con llevarte al teatro y no sé qué otras cosas más, como hace con Jazmín.
Tus tíos: Guido. Se limita a llegar y tocarte la cabeza. Siempre el mismo ritual. Al principio lo mirabas mal, pero ahora hasta ese ritual tonto te agrada. Marina: se cree la mejor tía del mundo, dice que todos los niños la aman. Vos todavía no le diste demasiada confianza, es medio pesada con los besos como la abuela. (Y te los da a la fuerza aunque no te gusten!!), pero cada tanto le dedicás unas sonrisas. Cecilia: es la más tranqui de todas. No te jode tanto. Una vez te cuidó en casa y te quedaste muy bien con ella. Por suerte no es tan pesada con los besos, y eso a vos te gusta más. Le sonreís bastante.
Te dejo aclaro que son todos muy buenos, muy lindos, pero llaman muy poco!!!! las tías se hacen las buenas, dicen que te extrañan, pero son lo más vagas que hay a la hora de visitarte!!! Así que siempre tenemos que ir a verlas nosotros...

Tu segundo hogar!!!

Papá siempre dice que viste más especialitas que nosotros dos juntos en todas nuestras vidas.... y es ciertooo!!!
Primero fue la cabeza chingada..... después de 6 meses perfecta, y cuando empezaste el jardín.... empezaron los problemas.... Diarreas dos veces por mes (te le hiciste encima a la pediatra!!), otitis cada dos meses, mocos todo el tiempo, conjuntivitis una o dos veces, virus de todos los tipos, anemias, sarpullidos.... y no sé cuántas cosas más. Ya viste un gastroenterólogo, un hematólogo, una dermatóloga, y tenemos que pedir turno ahora con el otorrino y el odontólogo!!!! A vos te parece? A esta edad.
Lamentablemente heredaste la piel de tu papá, porque cada dos por tres te brotás toda, te llenás de zarpullidos por el calor, y encima te rascás como papá y te lastimás!!! Un desastre!
Fui más veces con vos al Cemic que yo en 29 años!!!
Pero igual sos sanita y hermosa...

lunes, 26 de noviembre de 2007

Tus gustos y no tanto


Te encanta el tomate. Muy loco, porque podés devorar muchos tomates seguidos, sin sal, sin aceite, sin nada. Ayer en lo de tu "padrina" Lucila te comiste casi todos los tomates de nuestros sandwichitos de lomo.
Te fascina también la banana. De hecho es la única comida que llamás por su nombre: "nanana". También comés melón, postrecitos Ser de mamá, flancito, shimmy, etc. No te gusta el Danonino (lo que comen todos los nenes) ni la polenta.
Te encanta bailar. Desde muy chiquita, cualquier música que escuchás, te ponés a bailar. Y a veces incluso cantás. Te gustan muchos las canciones de patito feo, de Hi-5, o de cualquier publicidad que veas en la tele. Al mediodía cuando llegás del jardín me decís "Apai" y me mostrás los 5 dedos, una indicación de que ponga en la Tele Hi-5. También sos absolutamente fanática de Shrek, película que viste más de 1000 veces y no te cansás. Me la pedís a toda hora, sobre todo cuando comés, y encima te reís de los chictes.
Te gusta dibujar, armar rompe cabezas, te encantan los libritos, amás a Felipe (el gusano con el que dormís) y te gusta que te ponga crema dermaglós en el cuello.... (serás hija mía???). Además, te encanta lavarte los dientes todas las noches.... eso es único!!

No te gusta que te toquen a la mañana. Te ponés como loca. No te agrada mucho que te acaricie la panza, ni que te toque la cabeza.
No te pude dar todavía salchichas, ni te gusta la papa hecha puré, pero si al horno. Sos rarita.

Te fascinan las pizzas, podés comer hasta el cansancio.

Te encanta que te ponga ropa nueva, siempre decís "ahhhhh" y odiás que mamá te toque el pelo, aunque te gusta tener hechas colitas. Te encanta ponerte collares y pulseras y ponerte los tacos de mamá y caminar por toda la casa.

No te gusta que te estén encima, besuqueando ni mucho menos. No sos muy melosa, pero igual siempre querés Upa!!!

Cómo pasás tus días...


A los seis meses empezaste a gatear. A los 7 meses te paraste por primera vez. Y una semana antes del año empezaste a caminar.
Por suerte siempre cumpliste con las etapas en tiempo y forma. Algunos tardan más, otros menos.
Pasaste de ser una gorda rechocha enorme, a esta nena adorable y estilizada que sos ahora. Papá te decía "chancho", lo cual a mí al principio me pareció tierno, pero después no me gustó más. Por suerte ya te llama por tu nombre. Yo te digo pipi, cami, chini, cuqui y mil nombres más.
Tus días hoy son así: a la mañana hay que despertarte, ya que dormís como un chanchito, y vamos a dejar claro que no te gusta nada que te despierten!! Hasta que ves la leche, y empezás a gritar como una loca hasta que te la doy. Desde que tomás la mema, te la doy yo todas las mañanas y todas las noches. Es nuestro momento, así como el de papá es bañarte todas las noches.
Te llevamos al jardín, antes lo hacía papá, ahora yo. El Jardín te encanta. Amás a Verito y a Ale, y te quedás super contenta. Aunque la adpatación a los 7 meses nos llevó un poco de tiempo.
Al mediodía te voy a buscar, vamos a casa, jugamos, vemos la tele, comemos un postre, y cuando llega María (tu niñera nueva, porque Lili nos abondónó de un día para el otro cuando tenías 6 meses), yo vuelvo a trabajar.
Con María te llevás excelente. Nos costó conseguirla, pasamos por unas cuantas, pero ella te cuida como nadie.
Todas las tardes te dormís una gran siesta, y cuando llegamos papá y mamá alrededor de las 18.30 estás bien despierta para seguir jugando con nosotros hasta la hora de dormir, que suele ser alrededor de las 23.30. Muy tarde!!!

Tus seis meses: pequeña separación


Me tocó volver a trabajar. Tu concepción estuvo un poco mal calculada, ya que volví a Frávega en pleno octubre, con los kilombos del día de la madre, fin de año, etc. Así que de un día para el otro fue como si nunca me hubiera ido.
Fue raro separarme de vos tanto tiempo, pero nos las arreglamos bastante bien. Tres veces por semana te quedabas con Lili, y los otros dos con tus abuelas Jusita o Tutti.
Yo volvía (y lo sigo haciendo) todos los mediodías para verte, lo cual me cortaba bastante el día y la separación no se hacía tan tediosa.
Entre los 3 y los 6 meses creciste mucho. Te sentaste muy rápido. Creo que ya a los 4 meses y medio te mantenías prácticamente sola sentada. Ya habías dejado el chupete, y de a poco empezaste a amar la mamamdera!!! Para mi fue como un abandono, porque no querías la teta, pero después entendí que evidentemente ya no te alimentaba lo que vos necesitabas.
Los días que te quedabas con la abuela Jusita ella venía a casa a cuidarte. Al princpio era muy gracioso porque la abuela tenía muchos miedos, de cómo cambiarte, cuidarte, darte la mamadera. Pero ahora es la más canchera de todas con vos. Y te encanta pasar tiempo con ella, aunque te cante todo el tiempo! (jejeje).
En el caso de la abuela Tutti, te llevábamos una vez por semana a su casa. Por supuesto que cada cosa que yo le dejaba indicada me contestaba con un: "me lo vas a decir a mí, yo crié a cuatro!!". Creo que eso te resume un poco cómo es tu abuela Tutti!! Ella se las sabe todas. En su super casa grande la pasabas genial, porque te la pasás explorando todos los rincones y jugando con la tortuga de la tía marina.

jueves, 22 de noviembre de 2007

01-03 meses


Desde bebé me dijeron que sos una nena muy atenta. Y no lo dudo. Probablemente todas las madres hablen de la inteligencia de sus hijos, y no soy la excepción. Pero realmente creo lo sos.

Naciste con la cabeza medio "chingada". Fue una de nuestras primeras consultas (de muchas otras) extra obligadas al médido. Digo extra obligadas porque cuando sos bebé, hay que ir todos los meses a control (peso, altura, etc). Pero en tu caso, consultamos porque tu cabeza se iba de lado.
Hubo dos teorías, más o menos creíbles. La de los médicos, sobre todo la de tu pediatra, era que eso se daba por la posición en la que siempre dormías, ya que como sabrás, los bebés cuando nacen aún tienen la cabeza blanda y se les va endureciendo a medida que crecen (será así o estoy diciendo cualquiera?). La otra teoría, la nuestra, y creo que un poco más creíble, era que quedaste así por el parto y los fórceps.
De cualquier manera que haya sido, la cuestión es que te pusimos a dormir del otro lado, y mejoraste un montón, con lo cual la pediatra tendría razón. O quizás al crecer el pelo se nota menos, ya no lo sé.

Fuera de esto, tus primeros meses no nos trajeron mayores complicaciones. Desde que tuviste 20 días ya empezaste a dormir de 6 a 8 horas. Los primeros días me levantaba a las 4 de la madrugada a darte la teta mientras miraba Crónica (de noche trabaja ahí Leo, el papá de Tomy, que aún estaba en la panza. Yo sabía que si aparecía él en la tele, era porque Vale todavía no había pardido).
Ya al poco tiempo empezaste a despertarte a las 6, a las 8... un placer de hija, porque dormías como un angelito.

A los 20 días de nacer se te calló el cordón... una alegría, porque limpiarlo era una tortura! Al mes te pelamos y te pusimos los aritos. Cuando papá te vió pelada no le gustó, sintió que te habían cambiando, pero se adpató rápidamente a tu nuevo look.

Para ese entonces usabas chupete, que después Lili, tu primer "niñera" se encargó, muy a mi pesar, de sacártelo. Mirándolo un año después me doy cuenta que no fue tan malo el hecho de sacártelo, porque tengo la teoría absolutamente personal de que los nenes sin chupete hablan más y son más desenvueltos. Pero dudo que alguien esté de acuerdo conmigo.

Esos tres primeros meses fueron hermosos. Pasamos mucho tiempo juntas, porque yo no trabajaba. Vos tomabas la teta cada tres o cuatro horas y tu pequeño (no tan pequeño) cuerpito crecía a ritmo agigantado. Una gorda hermosa.

lunes, 19 de noviembre de 2007

Primer día y noche

Naciste toda moradita... parecía que ibas a tener piel oscura! Papá me miró como diciendo "será mía?" Por suerte el tiempo demostró que no hay duda, se parecen demasiado. Tenías los ojos claros y bien achinados. La cabeza enorme y con bastante pelo, lacio y oscuro, que ún guardo en el cajón del escritorio. Pesaste 3.820 kg lo cual es mucho, aunque creo que la mayoría del peso estaba en tu gran cabecita!
Pasaste el primer día llena de visitas, durmiendo casi todo el tiempo, con una paz increíble.

Siempre le digo a papá que la primer noche de un bebé marca su carácter para el resto de sus días. Al menos así lo vivo yo.
Tu primer noche no fue muy diferente a muchas otras. Lloraste mucho. Me imagino que te encontrabas perdida en este nuevo mundo fuera de la panza de mamá.
Yo estaba muy cansada. Habían pasado más de 40 horas sin que pudiera cerrar un ojo. Me dolía todo, me habían dado más de veinte puntos (esto sólo me pasa a mí!!), y realmente estaba agotada. Así que papá, con mucha pasciencia, te paseó la mitad de la noche para ver si te dormías, pero no había caso. Finalmente, yo abrí un ojo, y le dije que te ponga un ratito arriba mío a ver si te calmabas, y ahí fue cuando me di cuenta que lo único que tenías, era necesidad de sentirme a mí cerca. Porque te apoyaste arriba mío, y te dormiste plácidamente, al igual que yo. Un peligro, porque nos podríamos haber caído de la camilla, pero lo importante era estar juntas.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Tu nacimiento


Naciste un mediodía lluvioso de Julio. Exactamente el mismo día que los médicos habían previsto. Diez minutos antes de las 12 de la noche del día pactado, rompí bolsa. En realidad, en un principio, no sabía a ciencia cierta si había roto bolsa o qué era lo que ma habia pasado. Me imagino que por esto pasan muchas madres primerizas.
Estaba con papá mirando una película, "La terminal" con Tom Hanks, cuando en un pequeño esfuerzo que hice, sentí que me hacía pis. Corrí al baño, pero por supuesto no llegué. Creo que mi negación o mi miedo a que hubiera llegado el momento hizo que me dijera a mi misma que simplemente no había podido llegar al baño, y así fue como me acosté de nuevo como si nada hubiera pasado. A los pocos minutos volví a sentir que estaba mojada, y entonces le dije a papá que creía que había roto bolsa.
Con la increíble calma que lo caracteriza me dijo que no pasaba nada, que me acueste, que trate de dormir porque de cualquier manera no tenía contracciones, y que en un par de horas íbamos al CEMIC. Qué ingenuo! Él pensaba que yo podía dormirme! Por supuesto, a la media hora le dije que quería irme a la clínica, por lo menos para asegurarme de que no era el momento. Hicimos el bolso, llamamos un taxi, y salimos para el Cemic.
(Dejo aclarado que ya teníamos el auto, pero como tu tío Gus estaba en Buenos Aires, lo tenía él).

Yo ya te esperaba ansiosa. Dos días antes, mientras almorzábamos en un restaurante con el tío Gus que había venido de visita de españa, llamaron unos amigos para contarnos que Luz, que debía venir al mundo unas semanas después, había nacido. Sinceramente, me morí de la envidia, porque no veía la hora de conocerte.
Nos fuimos a plaza Las Heras a llevar a tu primo Tomy a pasear, y no paré de correr y jugar al fútbol con él con tal de que se apuraran las cosas. Mi mamá me había contado muchas veces que yo había nacido después de que ella tuvo que fregar todo el departamento que se le había inundado, y que de tanto esfuerzo, al día siguiente nací yo. Así que con esa idea, ese sábado hice lo mismo. Pero nada.
El domingo a la tarde nos fuimos al cumple de Lucila. Mi panza ya no cabía en ningún lado, pero a pesar de eso, comí alrededor de diez arrolladitos de dulce de leche que hizo la mamá de ella. Y eso ayudó más que la corrida y el fútbol, porque fue esa noche cuando la bolsa se rompió y trece horas después, viste la luz.

Al parecer estabas muy cómoda en la panza de mamá, porque costó que salieras. Estuve en la guardia del CEMIC un par de horas, porque no había camas, mientras esperaban que empiecen las contracciones. Papá esperaba sentado en una incómoda silla al lado mío, aburrido porque yo me dormía, así que él jugaba al solitario con su lindo (y caro) celular.

No voy a entrar en detalles de todo el proceso en la sala de pre-parto, que fue largo y tedioso. Finalmente, alrededor de las 13hs me llevaron a sala de partos. Había tanta gente que ya ni me acuerdo, pero sí te puedo decir que estaban: papá (obvio), el anestesista al cual le rogaba que me ponga más perdidural porque se me había ido el efecto (cero bola), la partera que me clavaba los codos en la panza, y todo un batallón de gente que gritaba: "pujá ahora, ahora no, pujá de nuevo". Y yo que no daba más. Lo que más me dolía eran las rodillas, que me las hacían abrir tanto que sentía que se me iban a romper. Nunca fui mjuy elástica.
Finalmente, escuché a la partera decir "un pujo más o vamos a cesárea", y así, con la ayuda de unos horrorosos y temibles fórceps, llegaste al mundo.
Te apoyaron sobre mi pecho, y con toda sinceridad, no supe qué hacer. Lo miré a papá, te miré a vos, y no omití palabra, raro en mí. Y así comenzó esta increíble y feliz nueva etapa de mi vida.

Por qué te escribo?

Cami, creé este blog para contarte tu vida. A pesar de que sólo tenés 16 meses, siento la necesidad de contarte todo lo que esté a mi alcance de tu vida, la mía, la de la familia, para que el día de mañana, cuando pueda leerlo, puedas disfrutar y conocer todo lo que te fue pasando, tus gustos, tus cambios, tus aprendizajes.
A vos Cami, que tanto te gustan los cuentos, te escribo.

Primer Año Cami